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HERIDAS SIN CICATRIZAR

  Son muchas las familias que cuando los hijos se quedan huérfanos, sienten la pena de la pérdida de los padres , pero también la ausencia de los valores que ellos  les inculcaron Desde estas líneas hago una llamada a la vuelta a la concordia. Los hijos tienen que ser transmisores de unidad y no de rivalidad. Los padres desearían, que por encima de todos los bienes materiales que les pudieran dejar en herencia, recordaran el esfuerzo, la ilusión y los sinsabores que tuvieron que pasar para que las siguientes generaciones disfrutaran una vida más cómoda y fácil. Honrar a los padres  fallecidos es el mejor ejemplo que se les puede  enseñar a los hijos . Los bienes materiales, son eso, materiales y fugaces, pero los valores como: la gratitud, el respeto, la solidaridad, la honestidad y la unidad son el bálsamo que se necesita para ayudar a cicatrizar las heridas que se producen cuando por encima del amor se instalan: el odio, el rencor y la envidia entre los her...

ACOLUMNA HOMENAJEA AL QUIJOTE CON SUS POEMAS





 A "Sanchica" La mujer de Sancho Panza.

¡¡¡No llores mujer

las ínsulas perdidas

no.

Los caminos abaratados

por el trote de Rocinante

y del burrito

sin nombre.

No sientas padecer

por aquellos

sueños

perdidos,

entre gigantes

molinos.

Ni la cordura 

serena

del que sueña ser, 

caballero andante

no de su fiel

compañero. 

Disfruta

de ser quien eres, 

acompañante leal

de locuras

aventuras. 

Que nombre

por el mundo

dieron 

al Ilustre 

Caballero ,

D. Quijote

De la Mancha. 


Acolumna S. González. 

15/4/2021.


ALDONZA LORENZO


Licencia pido

a sus señorías

para presentar

¡¡¡presto!!!, 

mi gallardía.

Dulcinea

me dicen, 

del Toboso

para más señas

sin identidad

propia

por ser

la amante

platónica

del de la

triste figura.

¡¡Ya ven

sus usías

Yo,

pobre y desgarbada

pasé

a la historia, 

creída

como moza

lozana,

de guapeza

y trapío

poco o nada

merecido.

Y así

de desconocida

sin saber

dónde me metía,

asentí

a los favores

añejos

del ilustre

caballero.

¡¡Ay Dulcinea

soltera y compuesta,

no era

mi belleza

la descrita,

ni de alta cuna

dama,

ni jóven

emperatriz

siquiera.

Bajo pesebre

nací

Aldonza

Lorenzo

morisca y

labradora

en esta triste

historia, 

de molinos

de viento.


ACOLUMNA.


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